miércoles, 9 de octubre de 2013
El Propósito de la Mujer
lunes, 7 de octubre de 2013
Princesa de Dios
A veces
se nos olvida que somos PRINCESAS DE DIOS, pues somos HIJAS de un REY y sólo
simple hecho de ser hijas de Él, nos da un VALOR cómo tesoros escondidos
(Perlas Preciosas), Se dice que una Perla es invaluable, ante los ojos de los
demás.
Princesa:
Princesa:
No eres
cualquier objeto, tú no eres tonta, no eres fea, no eres gorda, no eres inútil,
todo lo contrario tienes muchísimo valor, el enemigo ha querido engañarte a
través de esa autoestima bajo que no te ha traído nada de provecho ni
beneficio, tus temores te dicen: que en vez de ser algo que te impide avanzar
sea algo que te proyecta hacia adelante retrocedes, con este sentimiento,
sientes que ya no tienes sentido seguir viviendo, vuelta y regresas o te vas a
otra parte, te sientes derrotada, que lejos de recibir amor, recibes criticas,
lejos de recibir cariño, recibes desprecios, sobre esa área de autoestima de
maltratos verbales o físicas por esos supuestos “AMIGOS O AMIGAS” te puedo
decir con TODA seguridad que, NO SON DE DIOS.
Princesa de Dios hoy te dice tu Padre:
1.)
Mi
Princesa Tu eres un vaso de honra
2.)
Has
sido elegida para ser una PRINCESA DE DIOS
3.)
Para
eso te cree: para ser un vaso de honra. Deseo llenarte de mi amor, de mi
esperanza, de mis bendiciones, y derramarte sobre el mundo para apagar su sed.
4.)
Yo
soy el maestro alfarero, y tú eres el barro. Sé que tu deseo es ser formada por
mí, para ser usada por mí.
5.)
Aun
en esos días en que te sientes quebrantada y vacía, puedo usarte, en tanto que
te tomes fuertemente de mi mano.
6.)
Te
he elegido porque has visto tus propias heridas e imperfecciones y me has
entregado cada uno de esos trozos despedazados.
7.)
Nadie
puede convertirse en un vaso de honra mientras se quede sentado, bello,
erguido, y lleno hasta el tope de orgullo y autosuficiencia.
8.)
No
temas vaciarte de ti misma y de lo que te parece valioso; y permíteme llenarte
de aquello que es de incalculable valor.
9.)
Déjame
sostenerte. Permíteme inundarte. Déjame derramar mis bendiciones a través de
ti, y experimentaras el gozo desbordante de ser un vaso para mi honra.
Con amor, Tu Rey y tu Creador .....
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